Trastornos Psicológicos

Psicoterapia y Consejos

¿Qué es la ansiedad?

La ansiedad es un exceso de preocupaciones, estrés y temores normales de la vida cotidiana que se convierten en obsesiones y se tratan con psicoterapia y otras terapias naturales y alternativas.

En ocasiones sentir ansiedad es una necesidad, pues provoca en el organismo una reacción que prepara física y anímicamente para hacer frente a situaciones difíciles y realizar tareas desagradables: la liberación de adrenalina en el torrente sanguíneo. Pero cuando el grado de ansiedad es excesiva su efecto suele ser contraproducente: no sólo paraliza a la persona sino que hace que las preocupaciones y los temores normales de la vida cotidiana se conviertan en obsesiones agobiantes.

La ansiedad normal casi siempre tiene una causa de la cual la persona es consciente: por ejemplo, hacer antesala para una entrevista importante o la víspera de un examen escolar. En cambio, la ansiedad anormal ocurre cuando se experimenta preocupación o aprensión sin motivo aparente o cuando es exagerada.

Aunque la ansiedad es un estado emocional puede provocar síntomas físicos como dolor (sobre todo de cabeza, en el torso, el abdomen y la espalda), insomnio, tensión muscular, mareo, náuseas y vómito, diarrea y micciones frecuentes. La persona puede mostrar signos de pánico como sudoración, palpitaciones y respiración jadeante, o experimentar cansancio, debilidad y apatía. Los síntomas generalmente desaparecen cuando ya no hay motivo para sentirse ansioso, pero algunas personas sufren ataques recurrentes de ansiedad durante varios años; en tales casos se habla de ansiedad crónica.

Consejos de Naturopatía como psicoterapia para la ansiedad

Se aconseja seguir una dieta de alimentos enteros en la que predominen las ensaladas de frutas y verduras crudas, así como tomar complementos proteínicos si hace falta. Al parecer los zumos de zanahoria y de lechuga fortalecen el sistema nervioso y tienen un efecto calmante; hay que tomar un vasito de cualquiera de ellos durante el día y uno antes de ir a dormir. También se recomiendan las infusiones de manzanilla.

El naturópata dará consejos para mitigar el estrés y enseñará al paciente técnicas de relajación y respiración, además de sugerirle que haga ejercicio. Es probable que también prescriba complementos de vitaminas B y C para reducir la ansiedad y de vitamina E para mejorar el funcionamiento del sistema nervioso central, así como complementos de calcio, magnesio y cinc.

Consejos de Herbología como psicoterapia natural para la ansiedad

Para combatir el insomnio puede recurrirse a las infusiones de manzanilla, raíz de valeriana y flores de tila, que tienen propiedades sedantes. Para mitigar la ansiedad también se recomiendan las infusiones de flores de argemone, romero, betónica (no más de dos tazas pequeñas al día pues puede provocar vómito), lúpulo (excepto si se está deprimido), pasionaria e hisopo (que no debe darse a embarazadas).

Consejos de Homeopatía para el estrés y el exceso de preocupaciones

Gelsemium es el remedio indicado si se experimenta ansiedad, temor, debilidad en las rodillas o temblor corporal ante la proximidad de un examen o algún suceso desagradable. El Argentum nitricum puede ayudar si la persona siente temor o pánico de encontrarse en medio de una muchedumbre o en un espacio cerrado, o bien, si tiende a hacer cosas de forma impulsiva. En tales casos hay que tomar una dosis de ese remedio con una potencia centesimal de 30 a 200 la víspera del día en que deba ocurrir la situación generadora de ansiedad, y una dosis cada 60 minutos durante dos o tres horas ese mismo día. Hay que tener presente que los síntomas de ansiedad tienden a empeorar en los días calurosos. El Aconitum ayuda a mitigar el pánico, el temor y la inquietud excesiva, y el Arsenicum album es aconsejable para los casos de ansiedad persistente con ataques de pánico ocasionales.

Consejos de Sales Titulares para el tratamiento psicológico de la ansiedad

Para combatir la ansiedad general conviene tomar tres dosis diarias de fosfato de potasio durante un mes (la dosis para adulto es de cuatro tabletas y de dos la de niño).

Consejos de Aromaterapia para el estrés y el exceso de preocupaciones

Se recomienda inhalar varias gotas de cada uno de los siguientes aceites esenciales si se experimenta pánico: albahaca, lavanda y sándalo. Si además hay dolor de cabeza o tensión muscular, conviene inhalar también aceites de mejorana y manzanilla. Para relajarse pueden servir el incienso y el pachuli; el ilang-ilang supuestamente combate el insomnio, y la melisa ayuda a levantar el ánimo.

Consejos de Hidroterapia como terapia alternativa

Se recomiendan los baños de agua tibia y la aplicación alternada de compresas calientes y frías.

Remedios de Bach como psicoterapia natural para combatir la ansiedad

Un ataque agudo de ansiedad puede mitigarse con Remedio de urgencia. Se recomienda usar castaño blanco para combatir los pensamientos obsesivos recurrentes que impiden concentrarse o conciliar el sueño; Scleranthus si la ansiedad se acompaña de indecisión, y agrimonia para manifestar serena alegría aunque se sufra inquietud.

Consejos de Acupuntura como tratamiento psicológico de la ansiedad

El tratamiento con agujas puede ser de mucha utilidad pero depende de la causa de la ansiedad, como el insomnio y la fatiga. Hay otras terapias que pueden ayudar a las personas aquejadas de ansiedad, principalmente a través de la enseñanza de técnicas de relajación, como el entrenamiento autógeno, la terapia por medio de la danza, la hipnoterapia, la meditación, la osteopatía, la reflexoterapia y el yoga.

Consejo Clínico Ortodoxo para el tratamiento psicológico de la ansiedad

El médico primero tratará de determinar la causa de la ansiedad del paciente, y también averiguará si manifiesta síntomas físicos ocasionados por alguna enfermedad. Es probable que el médico le pida hablar acerca de los aspectos de su vida que generen ansiedad en él, como conflictos maritales, preocupaciones económicas y dificultades de trabajo. El apoyo y los consejos del médico a menudo bastan para que la persona se sienta mejor, pero si hace falta le prescribirá tranquilizantes o sedantes. Cabe señalar que no hay un antídoto para mitigar la ansiedad en forma permanente; los fármacos simplemente ayudan a aliviar los síntomas y pueden provocar adicción si se usan durante periodos prolongados. Si la ansiedad es tan intensa que interfiere las relaciones interpersonales y las habilidades del paciente, es casi seguro que el médico le aconseje consultar a un psiquiatra, el cual quizá prescriba medicamentos más potentes o alguna forma de psicoterapia.